Un verdadero tesoro que crece en la hermosa región de Kibira, en terrenos elevados entre 1.500 y 2.300 metros sobre el nivel del mar. Este entorno montañoso no solo es impresionante, sino que también proporciona las condiciones perfectas para cultivar la exquisita variedad Bourbon. Gracias a esto, cada grano refleja una calidad excepcional que te hará sonreír con cada sorbo.
En las estaciones de lavado de la zona, se cuida cada detalle del proceso, lo que asegura que los sabores únicos, influenciados por la altitud y el rico suelo, se desplieguen en toda su gloria en cada taza que disfrutas.
Cuando pruebes el café Burundi Tanganyka, te deleitarás con sus notas de chocolate, toques frutales, un suave aroma floral y un susurro de jazmín. Todo esto es el resultado del esmero y dedicación de los agricultores, quienes cuidan con cariño cada etapa del cultivo y la cosecha. Sin duda, este café se destaca por su calidad excepcional y te ofrece una experiencia de degustación única y deliciosa que querrás compartir.